miércoles, julio 26, 2006

¿HABRÁ CAMBIOS COLORADOS?

(Publicado - El Observador 26/07/06)
Algunas cosas están pasando adentro del Partido Colorado y no es para menos. El desastroso resultado electoral movió las fibras más íntimas de un colectivo humano que sabe que tiene que cambiar para adaptarse a los nuevos tiempos.
Por cierto, no se trata sólo de una nueva organización interna más abierta, más ventilada, con más descentralización­­­ y con apertura hacia las nuevas generaciones junto a encares de género. Eso está bien, pero no alcanza. Hay que hacer mucho más.
Hay que sincerar el discurso ideológico de un partido que curiosamente ganó por fuera lo que las urnas no le reconocieron. Hablar hoy de aporte privado en empresas públicas, procurar acceder a nuevos mercados sin miedos ideológicos retardatarios, aceptar las reglas de la macroeconomía, insistir en la inversión nacional y extranjera como plataformas de despegue, son todas banderas por las que dimos todo y, en su oportunidad, la ciudadanía nos dio la espalda. Ahora, con otros actores en el gobierno que –paradójicamente– a casi todo esto antes le dijeron que no, la historia nos da la razón. Pero hay que hacer más
Los colorados tenemos la obligación de analizar nuestra visión ideológica y aterrizarla dentro del debate entre el liberalismo y la socialdemocracia, ejes éstos que de alguna manera enmarcan las contiendas de la civilidad presente y futura. Es cierto que tenemos allí un contencioso que sólo el ciudadano laudará. Está claro que algunos colorados quieren menos Estado y deberán verbalizar sus propuestas. Y está claro que otros colorados quieren un Estado más eficaz, no necesariamente voluminoso pero protagonista significativo de algunos cambios sociales. ¿Son matices? ¿Hay una profunda diferencia en cómo imaginamos la sociedad del futuro? ¿Dónde están los puntos de entendimiento de la nueva matriz batllista? Estos son algunos desafíos que tenemos que empezar a sincerar y procesar cuanto antes. Y la creación de un Congreso Ideológico que se reúna con cierta periodicidad, con documentos de base, para ir discutiendo un nuevo diseño de sociedad, será un instrumento imprescindible. Pensar y discutir para hacer y no improvisar.
El siglo que se fue, entre muchas cosas, estuvo marcado por el rescate de los derechos humanos. El Uruguay aún hoy sabe que esto es cierto. El tiempo que viene está signado por el compromiso ético. En esto, también, los colorados tenemos que adentrarnos sin temores, haciendo gala de la construcción de estos motores de dignidad que nos permitan actuar y sentir que estamos haciendo lo correcto. Por eso la instalación de una Comisión de Ética y Disciplina partidaria, con carácter permanente, dentro del colectivo colorado, con el mandato adicional de aportar un código de comportamiento partidario, es una buena nueva que debe percibirse como un paso positivo. Cuanto más ética, más credibilidad para cualquier partido político.
Por cierto, sólo esto no alcanza para superar la adversidad. Luego vendrán las mujeres y hombres que hacemos el cotidiano de este partido, los que tendremos que irnos adentrando en los desafíos de las próximas horas sabiendo que sólo asumiendo riesgos se conquista el porvenir. Sólo comprometiéndonos con un rango de prioridades y el necesario relevo generacional, se entenderá lo que queremos reconstruir. Y eso pasa por hablar claro, asumir algunos compromisos básicos, volver a apelar a la lógica colorada del buen relacionamiento interno y levantar las banderas del humanismo batllista que –creo– están metidas en buena parte de la cabeza de la sociedad uruguaya.
Por algo será que todos estos días hay tanto debate sobre el grado de batllismo del país. Por algo cierto jerarca de gobierno explícitamente expresa que nos quiere aniquilar. De seguro, tan poca cosa no debemos ser para generar tanto revuelo.
Se trata entonces de hacer los cambios que la hora impone, ambientar los espacios para cambiar al Partido Colorado y atreverse a desafiar el presente de manera proactiva.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola, te comento que es la primera vez que entro a tu blog y lamento decirte que está medio quieto.
Lo que quiero decir es que me interesaría más que tus post fueran sobre los temas de acutalidad, pero no un mes después de sucedidos, sino cuando los hechos cuando están sucediendo.
No sé si esto te sirve, pero me parece importante compartir mi visión para que quizás puedas cambiar algo.
Saludos,
Alexis =D
PD: Deberías agregarle algo de color al blog porque el diseño está bastante aburrido :S

Anónimo dijo...

¿Es que recién se dan cuenta que tienen que hacer cambios en el partido?
Me parece que desde las elecciones que están viviendo en otro país porque como que ya se hizo tarde para los cambios. La gente que votó a otro partido como castigo a uds. ya espera más los cambios.
Parece que la única esperanza que les queda es esperar que el partido que está gobernando corra a sus votantes (como lo han hecho y siguen haciendo uds.).

Está bien que las cosas no se hacen en caliente, pero tampoco es para esperar dos años, porque ahora las cosas están más que heladas para vuestro partido.
¿Eso lo tendrías que haber escrito hace más de un año!
Es triste pero es así.